Terapia con láser en dermatología

Una de las primeras aplicaciones del láser ha sido para tratar lesiones que pueden sangrar o con riesgo de hemorragia. Así se comenzó a usar para tratar los hemangiomas, angiofibromas o granulomas piogénicos. Para el tratamiento definitivo de las verrugas, que aunque sea una infección común, y haya múltiples remedios disponibles, siguen siendo difíciles de eliminar. Para esto se usa principalmente el láser CO2.

El Molluscum Contagiosum, altamente infeccioso y difícil de controlar, se trata con el láser CO2, así como queratosis actínica y queilitis o incluso lesiones precancerosas o cancerosas como basocelulares o espinocelulares que no estén muy extendidos.