23 Ene Piel sensible
Posted at 15:00h
in Aesthetic Treatments, Cosmética, Dermatología, Estética Médica, La piel, Medicina del antienvejecimiento
El concepto “piel sensible” es independiente tanto de la tipología cutánea como del fototipo de quien la “padece”; por ello el formulador deberá crear líneas completas de productos de higiene, mantenimiento y tratamiento, así como los correspondientes preparados de cosmética decorativa, adaptados a las diferentes circunstancias que pueden concurrir en un usuario con problemas de hiperreactividad cutánea.
De forma genérica, las lineas cosméticas para pieles sensibles deben cubrir los siguientes objetivos:
• evitar/atenuar la irritación
• reconstituir la emulsión epicutánea
• reestructurar la capa córnea (recuperar la función barrera, habitualmente disminuida en este tipo de pieles)
• proteger contra el agente causal y, eventualmente facilitar su eliminación
• proporcionar “confort” (reducir prurito, dolor, tensión, sequedad, descamación,
enrojecimiento,…)
• a medio/largo plazo : recuperar la eudermia y reducir el umbral de reactividad de la piel
En definitiva, un cosmético adaptado deberá realizar cuatro acciones : proteger, hidratar, reparar y calmar, y todo ello con unos especiales requerimientos de calidad y adecuada selección tanto de los ingredientes como de las formas de aplicación, dado que es fácil que alguno de los componentes de las mismas pueda desencadenar en determinados usuarios la temida respuesta de tipo reactivo.
Características generales de vehículos y formas cosméticas
La simplicidad de las formulaciones es sin duda uno de los principales factores a considerar; en efecto, interesa reducir al máximo el número de ingredientes a fin de reducir el riesgo de que alguno de ellos pueda desencadenar una respuesta reactiva, y ello, sin perjuicio de la calidad final percibida por parte del usuario. La preformulación de estos cosméticos es en consecuencia una fase crítica, dado que el formulador deverá prescindir de toda una serie de recursos en aras de una mejor dermocompatibilidad del preparado.
Los vehículos deben seleccionarse de forma que se les pueda asignar con rigor los calificativos de “no agresivos”, “testados dermatológicamente”, “hipoalergénicos”, “no comedogénicos”, lo que comporta un concienzudo screening que incluya, entre otros, tests de compatibilidad cutánea, de tolerancia sobre mucosas y de comegenicidad
Los vehículos deben presentar actividad propia (no deben actuar exclusivamente como soporte de los activos cosméticos propiamente dichos); así deben proporcionar :
• protección cutánea : a fin de minimizar los efectos de la posible reactividad ocasionada por contacto de la piel con substancias exógenas o del propio cosmético aplicado.
• restauración de la función barrera, en aquellos casos en los que la TEWL (perdida de agua transepidérmica) esté significativamente aumentada en razón de posibles alteraciones de la estructura intercorneocitaria.
Diferentes técnicas, basadas en la utilización de métodos biofísicos no invasivos pueden ayudar, tanto a la evaluación del status de piel sensible, como a la de la eficacia de proteccion/restauración de ingredientes o productos cosméticos del tipo que nos ocupa.
Las formas de aplicacióndeberán adaptarse a fin de ser compatibles con las pieles reactivas; entre otros aspectos deberán considerarse :
• las propiedades reológicas de los preparados (evitar aparicion de reactividad por
efecto mecánico)
• la emoliencia y características de oclusividad de los preparados (acción
barrera/transpirabilidad)
• la capacidad antiprurítica, refrescante o calmante, requerida en determinadas
formulaciones