22 Oct HIPÉRICO
El hipérico (Hypericum perforatum L.) es una planta perenne que pertenece a la familia de las Hipericaceaes o Guttiferae. Es una planta muy cosmopolita oriunda de muchas partes del mundo.
Los médicos antiguos como Hipócrates, Plinio, Dioscórides y Galeno ya escribieron acerca de las propiedades medicinales del hipérico y lo usaron tradicionalmente para curar heridas, reducir inflamaciones y cardenales, como antineurálgico en casos de ciática y dolor de cabeza y para tratar la tuberculosis y otras afecciones respiratorias.
Los usos más comunes del hipérico han sido el tratamiento de la depresión y diversos problemas fisiológicos y neurálgicos, como antihelmíntico contra los gusanos intestinales, para hemorragias menores, en infusión para niños con enuresis y como diurético.
Al hipérico se le llama “hierba de San Juan” en muchos lugares, debido a que florece en esa época y según una tradición inglesa hay que arrojar flores de esta planta a una hoguera la noche de San Juan.
Componentes principales
El hipérico contiene numerosos principios activos con una actividad biológica documentada. La mayoría de los investigadores consideran que sus efectos se deben más a la variedad de constituyentes que a un único constituyente. Los principios activos que más han llamado el interés son las naftodiantronas (hipericina y pseudohipericina), una amplia gama de flavonoides (quercitina, quercitrina, amentoflavonas e hiperina), floroglucinoles (hiperforina y adhiperforina), el aceite esencial y xantonas. Las sumidades floridas encierran un 8-10% de agua y un 4-5% de materias minerales.
Indicaciones terapéuticas
El hipérico es una planta que ha sido objeto de múltiples estudios clínicos y experimentales. De ellos destacan las amplias investigaciones realizadas sobre sus efectos antidepresivos y más recientemente hacen hincapié en su gran potencial como agente antivírico. Además, sus propiedades astringentes, antisépticas y cicatrizantes (debidas a su contenido en aceite esencial y taninos), conocidas desde el antiguo y que han sido confirmadas recientemente, hacen que con su utilización se obtengan también muy buenos resultados en el tratamiento de heridas y quemaduras en aplicaciones externas.
Parece ser que la hipericina es la principal responsable de sus propiedades antidepresivas y sedantes ligeras, resultando sumamente útil para el tratamiento de depresiones suaves y moderadas. Los estudios realizados indican que el efecto antidepresivo puede sr debido a que actúa sobre determinados neurotransmisores a nivel cerebral, principalmente en aquellos que mantienen el estado de ánimo y la estabilidad emocional dentro de la normalidad. El efecto ligeramente sedante y calmante se debe a su contenido en naftodiantronas y xantonas lo que también contribuye favorablemente a mejorar los estados depresivos.
En uso externo es un buen cicatrizante (aceite esencial), analgésico, antiséptico, antiinflamatorio y astringente y antihemorrágico. También en preventivo de los tumores cerebrales.
Contraindicaciones
El hipérico está contraindicado en el embarazo por su acción uterotónica.