18 Dec Recomendaciones dietéticas tras la cirugía bariátrica
Después de la cirugía bariátrica, el paciente debe modificar sus hábitos de alimentación, que se van adaptando progresivamente a la nueva situación de la operación, permitiendo una adecuada pérdida de peso y un mantenimiento del peso perdido y minimizando el riesgo de deficiencias nutricionales. Las recomendaciones dietéticas dependen en gran medida de la técnica que se ha empleado.
Habitualmente se emplea una dieta por fases, en las que se va incrementando de manera progresiva la consistencia de los alimentos ingeridos:
-Dieta líquida o semilíquida: se emplea durante los primeros días post-cirugía, para proteger las anastomosis y prevenir la dilatación del residuo gástrico. La ingesta de líquidos se realizará en pequeñas tomas a lo largo de todo el día, para mejorar la tolerancia y prevenir la deshidratación. Se recomiendan alimentos como la leche o el yogurt, así como caldos, etc. Se pueden utilizar suplementos proteicos líquidos. Con este tipo de dieta, muy pobre en residuo, es muy frecuente el estreñimiento, especialmente si el estado de hidratación no es bueno. Se debe asegurar una ingesta de líquidos superior a 1000-1500 ml al día.
-Dieta semisólida: poco a poco se irán introduciendo purés y alimentos semisólidos, adaptando el volumen de las tomas al tamaño del reservorio gástrico. Los purés deben contener verduras y alimentos ricos en proteínas, como pollo, carne o pescado.
-Dieta con alimentos de consistencia normal. La dieta será progresivamente más variada, prestando especial atención a la educación alimentaria continuada para conseguir una adecuada pérdida de peso.
La dieta a largo plazo tas la cirugía bariátrica debe cumplir las premisas del tratamiento de la obesidad: hipocalórica, equilibrada y adecuada para cada paciente. Es importante asegurar una adecuada ingesta proteica, en torno a 1g/kg/dia, que será mayor en las técnicas con componente malabsortivo (BPG dista, DBP). Se dará prioridad al consumo de pescado, huevos, carne magra, lácteos, etc. Se puede tomar legumbre con moderación, como fuente de proteínas de origen vegetal, carbohidratos complejos, fibra, limitando sin embargo el consumo de harinas refinadas, dulces, etc.
Se debe evitar la ingesta de bebidas alcohólicas. Además del aporte calórico que conlleva, la intesta de etanol disminuye la oxidación de las grasas y puede disminuir la pérdida de peso por este motivo. Además, su ingesta se asocia con numerosos déficits nutricionales (tiamina, riboflavina, piridoxina, folato, vitamina C, vitamina A, magnesio, zinc).