“Pérdida de volumen en las mejillas: ¿por qué ocurre? y ¿tiene solución?”

Unos pómulos tersos y voluptuosos siempre han sido considerados como sinónimo de juventud.  Con el paso del tiempo su pérdida de volumen altera la estructura y la forma del rostro invirtiendo el denominado “triángulo de la juventud”.

 “El triángulo de la juventud del rostro es la figura imaginaria que resulta, en una persona joven, al unir el punto más alto de cada pómulo con el centro de la barbilla. Esto se debe a que la grasa se encuentra de forma natural en la zona media de la cara, dando lugar a un aspecto más carnoso a este nivel. Progresivamente con los años se producen cambios en el hueso, los compartimentos grasos, los músculos y la piel provocando una inversión del triángulo”. Dra. Victoria Páez

  1. En la juventud, el volumen de la cara tiene una distribución homogénea y proporciona un aspecto más atractivo, ¿a qué se debe?

El proceso de envejecimiento comienza a los 25 años de edad, pero se empieza a evidenciar a partir de los 30. La piel de un niño es clara, uniforme y suave; las mejillas y los contornos son redondeados, la nariz es pequeña y achatada, y los ojos en proporción al resto del rostro son más grandes. La plenitud de la mejilla es característica de la juventud.

  1. ¿Podría comentarnos qué es el “triángulo de la juventud”? ¿y el “invertido”?

El triángulo de la juventud del rostro es la figura imaginaria que resulta, en una persona joven, al unir el punto más alto de cada pómulo con el centro de la barbilla. Esto se debe a que la grasa se encuentra de forma natural en la zona media de la cara, dando lugar a un aspecto más carnoso a este nivel. Progresivamente con los años se producen cambios en el hueso, los compartimentos grasos, los músculos y la piel. Aparece una pérdida de soporte de los tejidos del rostro por la reabsorción de hueso, flacidez de los ligamentos de retención y atrofia de los compartimentos grasos; lo que da un aspecto hundido a las mejillas. Debido a esta falta de soporte y el efecto de la gravedad algunos panículos adiposos se desplazan y esto hace que el triángulo se invierta.

  1. ¿Cuáles son los factores que influyen en la pérdida de volumen?

Influyen factores intrínsecos, determinados genéticamente por nuestro reloj biológico, y factores extrínsecos, que llegan a causar más del 70 % de los cambios que ocurren con el envejecimiento. Dentro de los factores extrínsecos tenemos la gravedad, las expresiones faciales, los hábitos de vida y sobre todo la exposición al sol.

  1. A parte de la pérdida de volumen ¿qué otros efectos producen el envejecimiento cutáneo?

La piel se vuelve más fina y pierde en parte la capacidad de producir colágeno y elastina, pierde tonicidad. Aparecen arrugas y las líneas de expresión. El tejido graso subcutáneo disminuye y se atrofian algunos compartimentos grasos. Como comentaba anteriormente, el triángulo de la juventud se invierte, desdibujando el tercio inferior del rostro, debido al descolgamiento de los tejidos.

  1. ¿Se pueden prevenir estos efectos?

Sí, se pueden prevenir tratando la piel desde que vemos los primeros signos de envejecimiento.

  1. ¿A partir de qué edad recomendaría empezar a tratarse con medicina estética? 

Esto se debe estudiar de forma individual, pero a partir de los 30 años puedes empezar.

  1. ¿Qué tratamientos aconsejaría?

Yo personalmente prefiero usar, por ejemplo, en los millennials, los voluminizadores que estimulan la producción de colágeno; ya que la capacidad de respuesta de su piel es estupenda. Si hay una deflación acusada debido a algún padecimiento o a la pérdida y ganancia de peso, entonces usaría un ácido hialurónico con elevada plasticidad y capacidad de integrarse en los tejidos. Para la mayoría de los casos, como prevención, prefiero un producto voluminizador a través de la formación de nuevo colágeno.

  1. Y una vez la pérdida de volumen es evidente, ¿qué tratamientos aconsejaría?

Como he comentado antes, cuando la pérdida de volumen es evidente se infiltra en el rostro ácido hialurónico con elevada G’, es decir, con capacidad de proyección y plasticidad para moldearlo y conseguir un resultado totalmente natural. Es primordial que el médico elija el producto que mejor se integre en los tejidos.

  1. Hay muchas personas que tienen miedo a estos tratamientos porque creen que éstos cambiarían radicalmente el aspecto de la cara… ¿Qué les diría al respecto?

Les diría que no tengan miedo, que ya hace muchos años que la medicina estética apuesta por unos resultados naturales, y esto con la técnica y el producto adecuado podemos garantizarlo hoy en día.

  1. ¿Son dolorosos?

La mayoría de los productos inyectables actualmente traen una pequeña proporción de anestésico incorporado, lo que hace que el procedimiento sea muy llevadero.

  1. ¿Se puede hacer vida normal después del tratamiento?

Absolutamente, aunque el día del tratamiento hay que evitar realizar deportes que haga sudar en exceso y, por supuesto, la exposición al sol. Además, se recomienda esperar unas horas para maquillar el rostro.

  1. ¿Cuándo se empiezan a notar sus efectos? ¿Cuánto duran?

Los resultados son prácticamente inmediatos, aunque en un par de semanas, donde el producto se ha integrado, se ve mejor el resultado. La duración de los efectos varía según el producto, pero podríamos decir que entre 12 y 18 meses, aunque recomiendo, dependiendo del grado de envejecimiento y las condiciones particulares de cada uno, repetir el tratamiento como media una vez al año.

  1. ¿Son tratamientos costosos?

No es un tratamiento costoso atendiendo a los beneficios que conlleva, pero obviamente, depende de la cantidad de producto que se infiltra.