La cavitación

Para que un equipo de ultralipolisis sea realmente efectivo debe tener al menos 3 MHz de potencia. Con 1 MHz de potencia se aplicará directamente a hueso, y será transparente para el tejido conjuntivo y adiposo. A mayor potencia se consiguen mejores resultados, ya que está directamente relacionada con la capacidad de crear cavitación, y una mayor implosión, estallido y rotura de la fibrosis. En equipos de alta potencia se produce un mayor fragmentado, liberando gricerol.
Las diferentes técnicas de aplicación permiten utilizar los ultrasonidos en hidrolipocalasia con solución fisiológica sin soluciones lipolíticas. Con esto se han conseguido resultados muy satisfactorios con una media de 10 aplicaciones.
El ultrasonido solo, se aplica con gel lipolítico y se obtienen buenos resultados en la piel de naranja y pequeñas adiposidades localizadas. La hidrolipocalasia ultrasónica, aplica la energía ultrasónico después de infiltrar medios líquidos.
Con la lipoescultura ultrasónico externa, se aplica la energía ultrasónica, después de infiltrar la solución de Klein; esto debilita el adipocito, y facilita el proceso de lipoaspiración.
La hidrolipocalasia ultrasónica es un método para reducir adiposidades localizadas y celulitis. Se infiltra una solución de agua destilada o suero fisiológico (mejor al 0,45, porque tiene menos sodio) a un centímetro de profundidad de la piel, en el seno de la grasa. Se produce un hinchamiento de los adipocitos por ósmosis, lo que debilita la membrana celular. A 10 Hz el ultrasonido actuará sobre la celulitis y a 50 Hz, sobre el tejido graso. Con la hidrocalasia, al infiltrar la zona a tratar con un medio líquido hace que la célula se hinche, y cuando se aplica la emisión ultrasónico estalla, liberando glicerol. Este se elimina por orina y matera fecal, después de pasar al hígado por la circulación linfática y sanguínea, y convertirse en hidrosoluble. También la emisión de ultrasonidos de alta potencia, genera termogénesis.
La emisión de 3 Mhz, actúa hasta 25 mm de profundidad, luego el líquido se debe de infiltrar de 6 mm a 10 mm de profundidad respecto a la piel.
La infiltración se puede hacer de diferentes formas: con una jeringa de 10 ó 20 cc, y aguja de 30 G, haciendo múltiples punciones, aproximadamente a medio o 1 cm de distancia una de otra. O utilizando una aguja espinal de 25 G y una jeringa de 60 cc, y haciendo una infiltración en abanico, depositando el líquido en retroinyección.
El cabezal del equipo nunca debe estar en contacto directo con la piel del paciente. Se debe aplicar un gel en cantidades suficientes, cubriendo toda la zona que se va a tratar, para que se transmita la vibración. Se debe desplazar de forma lenta para que profundice la onda ultrasónica.  El cabezal se debe mover continuamente y en la zona de la papada, se mueve de forma circular.
Se aplica de 10 a 15 minutos por zona, pero si se aplica durante 30 minutos, el efecto será mayor. Esta terapia no se aplica en embarazadas, ni en pacientes con cardiopatías o epilépticos.
El cabezal se desinfecta después de cada terapia con alcohol isopropílico. El tratamiento está indicado para la adiposidad localizada en papada, abdomen, zona trocantérica, cara interna de la pierna y flancos.

La cantidad de líquido a infiltrar es 10 cc en papada y el tiempo de aplicación de los ultrasonidos es de 10 minutos.  Para el abdomen 240 cc y 20 minutos los ultrasonidos. Es aconsejable aplicar 3 ó 4 sesiones seguidas, cada 3 ó 4 días. Dependiendo de cada caso es necesario al menos 48 horas para ver los resultados. Para el abdomen se necesita al menos de 10 a 20 sesiones para ver resultados.