Trastornos hipofisarios productores de hormonas glucoprotéicas

Las 3 principales hormonas glucoprotéicas segregadas por la hipófisis son la LH, FSH y TSH, además secreta la ACTH y GH. Cuando aparecen tumores secretores de hormonas gonadotropas, LH, FSH, más frecuente la segunda, se relaciona con pubertad precoz o niveles variables de testosterona. Cuando lo que suben son los niveles de TSH, entonces tenemos un hipertiroidismo, y se detecta por la elevación de los niveles de hormonas tiroideas con aumento inadecuado de TSH. En los últimos años se están ensayando fármacos análogos a la somatostatina que inhiben la secreción de TSH.
Cuando disminuye la producción de GH y cortisol, al ser las dos hormonas hiperglucemiantes, disminuyen los niveles de glucosa.
La disminución de LH y FSH produce pérdida del vello axilar y pubiano y disminución de la libido. En los varones se observa disminución de la frecuencia del afeitado y la potencia sexual.
El déficit severo de ACTH, produce astenia, anorexia, pérdida de peso, náuseas, vómitos, hipoglucemia, hipotensión y colapso circulatorio. El déficit de TSH, produce hipotiroidismo.
En la insuficiencia hipofisaria, la primera y más importante hormona a reemplazar es el cortisol, y la hidrocortisona es el glucocorticoide de elección a 20-30 mg por día, repartidos en 3 dosis o bien aportando dos tercios de la dosis por la mañana y el resto 12 horas después. La prednisona, prednisolona y dexametasona no son recomendables como tratamiento sustitutivo por las frecuentes interferencias con otros fármacos, y por las variaciones individuales secundarias a la absorción digestiva. En caso de enfermedades graves o intervenciones quirúrgicas se administra hidrocortisona o metilprednisolona intravenosa cada 8 horas.

El déficit de TSH, se trata con levotiroxina. En ancianos, niños y cardiópatas, la dosis inicial es de 25 microg por día, aumentando progresivamente cada 2-3 semanas. El tratamiento sustitutivo del hipogonadismo en varones es la administración intramuscular de enantato de testosterona, 100 mg semanalmente. Es preceptivo descartar previamente la existencia de una neoplasia prostática. En las mujeres se administra etinilestradiol y medroxiprogesterona.